Se han conocido las últimas exigencias del club napolitano, por una de sus fieras del medio campo
Diego Pablo Simeone sigue obsesionado con lo que va a ser según él, el plan de reestructuración del cuadro colchonero de cara al futuro. Su idea es seguir migrando a altas competencias con la inclusión de jugadores fuertes y dinámicos, que desde cada zona empleen un sacrificio extremo en recuperación y en aporte ofensivo.
Con la idea que se ha venido proliferando de sus potenciales fugas, sobre todo en el centro de la cancha, es que le ha nacido la idea de poder moverse por rutas hasta acá inesperadas. En Nápoles hay un jugador que ha llamado su atención, y del cual se ha podido saber que hay posibilidades enormes de poder ser concretado, se trata de Allan Marques Loueiro.
Para poder llevarse el gato al agua hay que entrar de lleno con 40 kilos
La situación está planteada de la siguiente manera, un pago por concepto de su cláusula de rescisión, que a día de hoy son unos 40 millones de euros, algo elevado. Sin embargo, representa lo que es la idea principal del entrenador argentino, que ve en Allan un buen elemento de despliegue y orden en la zona medular.
Junto al colchonero, hay dos clubes más interesados, que le dan dinamismo al tema. Ellos son el Arsenal de Inglaterra y el Borussia Dortmund de Alemania. Lo que sucede hasta acá es que ninguno está dispuesto a depositar los 40 kilos, y en su lugar han empezado a salir una serie de rumores y especulaciones bien diversas.
Herrera o Santi Arias, la fórmula para lograr convencer a De Laurentiis
Sin darse por vencido el estratega argentino va ahora con otro factor de su lado, la posibilidad de incluir dos jugadores para que sean ellos los que elijan. Como era de esperarse si escogen a alguno de ellos el valor final del brasileño de 28 años se vería reflejado a la baja, que es a final de cuentas el factor de fundamento que buscan sellar.
Estos jugadores son: Héctor Herrera o Santiago Arias, un mediocentro y un lateral derecho. De momento Genaro Gatusso no se ha pronunciado por lo que sea que resulte no es más que una vaga suposición y especulación. Hay que ver hasta qué punto están dispuestos a llegar y en qué medida quieren o pretenden presionar. Tema en el aire.