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Nuevo ridículo en El Chiringuito del polémico representante del Athletic

La derrota ante el Rayo Vallecano enfrenta a los dos colaboradores

Pedrerol siempre está atento donde se huele sangre y en esta ocasión, El Chiringuito se centró en la derrota inesperada del Athletic, con ridículo incluído de su representante más polémico. Hablamos de Edu Velasco, que quiso entrar por teléfono para dar cera a Marcelino y Elizegi pero en realidad terminó escaldado.

Y terminó escaldado por el otro representante del Athletic en El Chiringuito, un Nico Rodríguez mucho menos polémico. Como diría Pedrerol, Nico es el poli bueno, el que siempre saca reflexiones optimistas y se gana el cariño del club para acceder a exclusivas y entrevistas.

El Chiringuito
El Chiringuito aprovecha y busca ya la atención del Athletic con Velasco de por medio

Edu Velasco siempre en el candelero

Edu Velasco, por su parte, está en El Chiringuito porque Pedrerol ya sabe que entre la afición del Athletic es non grato. Un tío que finge ser muy del Athletic pero que rara vez tiene buenas palabras para directiva, entrenador o jugadores. En esta ocasión centró su furia contra dos integrantes de la plantilla del Athletic.

“Vesga y Dani García no están para la élite”, afirmó visiblemente mosqueado, no sin antes reprender a Marcelino por las rotaciones introducidas. Sin embargo, cuando más encendido estaba el polémico representante del Athletic en El Chiringuito, entró Nico Rodríguez.

Nuevo ridículo del representante del Athletic en El Chiringuito

“Marcelino hizo lo que había que hacer, rotar jugadores”, afirmó. Una opinión que comparten la gran mayoría de athleticzales. Y es que en esto del fútbol nunca se sabe. El Athletic generó ocasiones para marcar el 2-1 pero fue Falcao quien en el 95 y con el partido acabado, anotó el tanto de la victoria.

Edu Velasco ya se sabe cómo es. Pedrerol lo tiene como representante del Athletic en El Chiringuito por su fama de polémico. La actual directiva le tiene vetado a él y a Tele Bilbao, medio donde trabaja. Y eso lo paga explotando contra el club cada vez que tiene oportunidad.