Tener éxito junto al presentador de El Chiringuito tiene sus ventajas e inconvenientes, lo mismo que pasar desapercibido y ser becario en el programa es sabido que tiene un tiempo determinado de exposición mediática. Josep Pedrerol lleva años siendo uno de los periodistas más famosos de la pantalla deportiva. El efecto mediático cosechado con el programa que dirige, El Chiringuito, ha roto todas las barreras posibles, y uno de sus grandes secretos está en los tertulianos y becarios que lo componen, quienes ofrecen un gran rendimiento y son protagonistas de un espectáculo sin igual.
El mejor ejemplo posible lo encontramos en la figura de Fermín, quien se ha convertido en la mano derecha de Josep Pedrerol desde el primer momento. Poco a poco ha ido ganando más y más protagonismo, y ahora mismo es uno de los grandes pilares del programa. Todo ello, hasta el punto de convertirse en un foco de atracción, y es que muchos quieren firmarle debido a la fama cosechada en los últimos meses.
Su más que posible marcha del programa ha propiciado movimientos en El Chiringuito, especialmente por parte del propio Josep Pedrerol, a quien se le ha podido observar en la Universidad. El fichaje de un nuevo becario significaría la marcha de otro. Y es que parece que los dias de Fermin como becario están contadas, ya sea como nuevo colaborador, o directamente con su marcha a otro programa.
La audiencia le quiere, y eso es algo que Josep Pedrerol a buen seguro agradece. Aún así, es necesario saber lo importante que será tener un relevo de garantías, y es que en Punto Pelota ya supo lo que es contar con un equipo que no sea del todo especialista en lo que hace. Todo con el famoso: “becarios no”.
Habrá que estar muy atentos a lo que nos depara el bueno de Josep Pedrerol en los próximos meses. Alguna sorpresa llegará, y es que es inevitable que la entrada de un nuevo becario suponga la salida de otro. Estaremos atentos.
