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El Chiringuito expone al becario del Athletic con los peligrosos hooligans ingleses

Varios espectadores se quejan en redes sociales de la realización de este tipo de reportajes

El Chiringuito nunca está exento de polémica y con la llegada de los peligrosos hooligans ingleses no iba a haber excepción. Pedrerol siempre quiere imágenes espectaculares en el programa y tiende a enviar a los lugares más extraños a alguno de sus becarios.

En esta ocasión le tocó el turno al habitual representante del Athletic, Nico Rodríguez. Su misión, ni más ni menos, consistía en adentrarse en el ambiente de los hooligans del Liverpool. Con las restricciones de la pandemia relajadas, fueron miles los ingleses que se personaron en Madrid para vivir en directo el Atlético – Liverpool de Champions.

Chiringuito hooligans
Los hooligans ingleses toman las calles de Madrid

Los hooligans regresan a Madrid

Ya se sabe la que suelen organizar estos hinchas cuando comienza a fluir el alcohol por sus venas. Y allí se fue, Nico Rodríguez, para grabar para El Chiringuito las barbaridades que hacen los hooligans. Aunque en la opinión de Pedrerol, eso es hacer periodismo, las redes machacaron al presentador.

Muchos decían que con la mísera remuneración que reciben los becarios de El Chiringuito no es normal exponer así a un trabajador. “Que vaya Pedrerol”, se quejaba alguno. Y es que, aunque las imágenes recogidas sean espectaculares, es muy peligroso adentrarse con una cámara y un micrófono entre los enfervorizados hinchas del Liverpool.

El Chiringuito a la caza de los hooligans

Los hooligans se encontraban en la madrileña Plaza Mayor cuando fueron sorprendidos por las cámaras de El Chiringuito. La cerveza rodaba 5 horas antes del partido. Tuvo que intervenir la policía, alguno se marchó en ambulancia, hubo botellazos, golpes y un sinfín de basura acumulada en las calles madrileñas.

En esas condiciones tuvo que trabajar uno de los representantes de El Chiringuito, para que Pedrerol pudiera lucir las imágenes de los hooligans ingleses. Luego Pedrerol se lleva la medalla s¡de condenar esos actos, pero el periodista que se expuso a los ingleses corrió de su propia cuenta y riesgo.