El duelo del próximo sábado en el Ramón Sánchez Pizjuán viene marcado por la delicada situación de ambos equipos y por el error del VAR en la jornada pasada
Si un Sevilla FC – Cádiz CF ya supone un derbi espectacular, con colorido y con mucha rivalidad, este año es el partido de los partidos. Nadie se podía imaginar que a estas alturas sean rivales directos por eludir el descenso en LaLiga. Ni los precedentes, con el error del VAR, reconocido por el propio colegiado Iglesias Villanueva, en la pasada jornada.
Al Cádiz CF le birlaron 2 puntos frente al colista. Con esa victoria, el Cádiz se hubiese puesto empatado a puntos con la UD Almería en la decimotercera posición. Sin embargo, llegan al Pizjuán con 16 puntos, uno más que el Sevilla FC. Los de Sampaoli son penúltimos y la situación ya es de desesperación total.
El Cádiz teme encerrona en Sevilla
Por este motivo, el contexto lleva al Cádiz a temerse lo peor el su visita a Sevilla. El Elche está más o menos sentenciado, con tan solo 5 puntos. El regalo del empate el otro día, en claro fuera de juego, de poco o nada ayuda a los ilicitanos. Sin embargo, al que sí ayudó fue a un Sevilla FC que ahora depende de sí mismo para superar al Cádiz en la tabla.
Y es que hay motivos para temerse lo peor. Porque el Sevilla FC es un club que supone muchos beneficios económicos para LaLiga. Tienen un límite salarial por las nubes, una plantilla hecha para cumplir con los presupuestos de llegar a los cuartos de la Champions. Sin embargo ahora luchan por no perder la categoría, lo que implicaría unas pérdidas que harían mucho daño a LaLiga.
Un Sevilla FC en riesgo financiero
El riesgo financiero que supone un descenso del Sevilla FC, unido a la pérdida de dinero con la televisión y con patrocinadores, lleva al Cádiz a temer por su situación. Una derrota el sábado ante el Sevilla FC podría sumir a los de Sergio González en un pozo del que es muy difícil salir.
Porque una vez que se ha demostrado que el error del VAR le costó dos puntos al Cádiz CF, el club amarillo se ha instalado en una espiral de protestas que quitan foco a lo realmente importante: el partido del sábado. El Sánchez Pizjuán será una olla a presión a partir de las 21:00 horas del próximo sábado.
