A pesar de los malos resultados y de acumular seis jornadas sin ganar, Bolo dejó claro que no perderá la determinación ni abandonará su estilo de trabajo
El Burgos sumó otro golpe duro en su visita al Martínez Valero, donde el Elche se impuso sin grandes complicaciones. La situación del equipo burgalés se agrava, ya que en los últimos seis encuentros apenas han conseguido dos empates. Sin embargo, Bolo se muestra determinado a seguir al frente del equipo con la misma energía, subrayando que no abandonará su convicción ni su estilo de trabajo pese a los malos resultados. “No voy a bajar la cabeza ni los brazos nunca”, afirmó con claridad el entrenador.
Durante la rueda de prensa, Bolo reconoció que el rendimiento del equipo en la primera parte estuvo por debajo de las expectativas, algo que asumió como responsabilidad propia. “Nos equivocamos mucho, sobre todo yo. No entendimos qué tipo de partido teníamos que jugar”, explicó. A pesar de los ajustes en la segunda mitad, la mejora no fue suficiente para alcanzar el empate, y el Burgos vuelve a casa sin puntos.
La disposición táctica fue insuficiente para frenar al Elche
Bolo fue crítico con el planteamiento inicial, describiendo cómo el equipo se replegó más de lo que había planeado. “Queríamos estar en campo contrario, pero terminamos demasiado atrás, dándoles demasiadas opciones”, lamentó. El entrenador comentó que la falta de coordinación en los intentos de recuperación también afectó su capacidad para dominar el encuentro. “No se puede ir a robar balones en oleadas, tienes que ir juntos”.
El sistema defensivo no funcionó como esperaba Bolo, lo que quedó demostrado en el gol del Elche. “Defendimos mal la jugada, dejamos que remataran solos. Fue un jarro de agua fría y estábamos deseando que llegara el descanso para volver a ser nosotros”, expresó con frustración.
Bolo defiende su continuidad y niega ultimátum del club
A pesar de los rumores y la presión por la mala racha, Bolo dejó claro que nadie en el club le ha comunicado un ultimátum. “A mí nadie me ha dicho que tengo los días contados”, aseguró. En su discurso, el técnico también resaltó la importancia de seguir trabajando con humildad y mantener la unidad en el vestuario. “Esto es fútbol, y las cosas no siempre salen como uno quiere. Vamos a seguir luchando para revertir esta situación”.
Con un mensaje de perseverancia, Bolo reafirmó su compromiso con el equipo y sus jugadores. “He caído y me he levantado muchas veces, y esta no será la excepción. Moriré con los míos, como ellos morirán por mí”, sentenció. Según el entrenador, el camino hacia la recuperación empieza ganando el próximo partido, y aunque reconoce que el equipo atraviesa una racha difícil, confía en que pronto podrán salir del mal momento.
