La pesadilla del jugador ghanés en la Premier League
Cuando el Arsenal anunció su fichaje estrella proveniente de el Atlético de Madrid, las esperanzas estaban depositadas en el mediocampista ghanés Thomas Partey. Su buena técnica y rendimiento mostrado en el equipo colchonero. Le bastaron para convencer al cuerpo técnico y las directivas del conjunto gunner.
Sin embargo el jugador de 27 años pasa por una de sus mayores crisis de su carrera deportiva, al punto que los medios ingleses califican su fichaje como un total fracaso. En total fueron 40 millones de euros los que el club londinense desembolsó al cuadro madrileño por el fichaje que hasta hora no ha marcado diferencia.
Thomas Partey, el crack de el Atlético de Madrid que pasó a ser el fracaso de el Arsenal
El jugador no ha logrado adaptarse a la Premier League y menos al esquema táctico de Mikel Arteta. Sus actuaciones con el club rojo de Londres dejan mucho que desear y su nivel dista demasiado al que tenia con el equipo colchonero. Es muy poco lo que el africano ha jugado, pero es por la misma razón que su entrenador lo tiene sentado en la banca.
Para empeorar las cosas, el jugador se encuentra lesionado y producto de ello se ha perdido varios encuentros claves donde se le ha necesitado. Desde su arribo al Fly Emirates Stadium solo ha jugado 1.279 minutos repartidos en 21 partidos. Las alarmas se empiezan a encender y el cuerpo técnico empieza a barajar soluciones.
Ante la mala pasada de Thomas Partey en la Premier League la solución más viable sería volver al Atlético
Tanto su agente como el jugador piensa que la mejor manera para recuperar su mejor versión es retornando al equipo colchonero. Para el africano se le facilita mejor el fútbol español ya que el inglés es muy rápido. Y las características de Partey son más las de un jugador técnico y con más pausa.
El Arsenal quiere tomar esta salida como última alternativa, ya que fue una inversión importante y quieren acertarla a toda costa. Pero en el peor de los casos y habiendo agotado todos los esfuerzos. El jugador saldría por una cifra menor a los 30 kilos o incluso mucho menos. Todo depende de su evolución futbolística.