El entrenador del Atlético empieza a agobiarse por el tapón que se ha formado en la operación salida
En este nuevo régimen económico que impera en el fútbol, los equilibrios del Fair Play Financiero (FPF) hacen que muchas veces terminen por caerse operaciones cerradas que no pueden completarse. Es el caso del Atlético, donde Simeone comienza a estar muy nervioso al ver pasar fichajes por culpa de las salidas.
Para poder fichar hay que vender. Eso es así para todos los equipos. Está pasando en el FC Barcelona, donde supuestamente Memphis Depay lleva varios días fichado. Sin embargo, mientras que no den salida a varios de los descartes de Koeman, los azulgrana no pueden anunciarlo.
Para fichar hay que vender
Algo similar está pasando en el Atlético de Madrid, donde Simeone ha dado el ok a varias salidas. Saúl es un claro ejemplo. El jugador ha perdido espacio esta temporada y Simeone ya le ha comunicado que no habrá objeción si decide abandonar el barco. Ofertas no le faltan, con el Chelsea y el Manchester United al acecho.
Otro que tiene que salir sí o sí es Vitolo. El canario cobra mucho y no entra en los planes. Villarreal, Valencia o Celta pueden ser el destino. Pero estamos en lo mismo, no termina de concretarse nada. Simeone dio una lista de descartes y el Atlético, por mucha negociación que haya, no termina de sacar a nadie.
Las salidas ponen nervioso a Simeone
Algo que comienza a poner de los nervios al técnico del Atlético de Madrid. Porque el mercado este verano es especialmente difícil. En los últimos días se ha afirmado que el argentino Rodrigo de Paul estaría ya atado. Y suenan más nombres para reforzar el club.
Pero sin salidas no habrá fichajes y eso pone histérico a Simeone. Sin ir más lejos, Rodrigo de Paul está jugando la Copa América, con todos los focos, y podría recibir más ofertas. El entrenador argentino es muy inquieto y quiere tener todo preparado de cara a la pretemporada. Es más eso que otra cosa.
