El futbolista navarro ha perdido su hueco en el once titular, pues Garitano ha reforzado su confianza en Asier Villalibre
La salida de Diego Costa del Atlético de Madrid puede tener consecuencias en el Athletic, que podría perder a Raúl García. El centrocampista, que con Garitano ha rendido a la perfección en la punta de ataque, podría abandonar el equipo. Lo haría para regresar con el que fue su equipo durante 9 temporadas.
Ahora, Simeone habría pensado en el que fuera su jugador para reemplazar al delantero hispano-brasileño. Y es que la marcha de Diego Costa también tendrá un efecto negativo en el vestuario rojiblanco, ya que era un jugador que hacía piña y que era el fiel reflejo de la afición en el campo. Algo que ahora necesitan cubrir.
Raúl García, el relevo perfecto de Diego Costa en el Atlético
En términos de personalidad, tanto Raúl García como Diego Costa son jugadores similares. Ambos viven el fútbol con gran intensidad y lo dan todo en cada partido. Un espíritu competitivo que contagio a los compañeros y que es muy bien valorado por Simeone, que quiere a un futbolista con esas características.
Pese a que nombres como el de Loren, el de Milik o el de Falcao están sobre la mesa para sustituir a Diego Costa, lo cierto es que Raúl García también es uno de los candidatos. Un candidato que no es muy del gusto de la directiva por la edad, ya tiene 34 años, pero sí lo es para Simeone, sabedor de su importancia dentro del vestuario.
El Athletic está dispuesto a dejar marchar a Raúl García
A pesar de que la pasada campaña Raúl García fue uno de los jugadores más importantes en el Athletic, el club no pondría ningún impedimento a su salida rumbo al Atlético de Madrid. De hecho, en agradecimiento a los servicios prestados por el jugador, facilitaría su salida todo lo posible.
Y es que en la actual temporada ha perdido su puesto en el once titular. Además, el contrato de Raúl García lo ata hasta 2021, por lo que en el mes de enero es libre para negociar con cualquier equipo, por lo que su marcha en el mercado de enero puede ser una realidad. Una realidad que puede producirse en los próximos días.