El actual rendimiento del club colchonero está empezando a levantar sospechas acerca del proceder de algunos jugadores y su ética profesional
Para nadie es un secreto que el Atlético de Madrid no pasa por un buen momento deportivo y que Diego Simeone es uno de los principales responsables. Aunque el míster está usando todo lo que su equipo fichó en el mercado estival pasado, los resultados no están llegando como él lo quiere. Ahora mismo son cuartos en LaLiga EA Sports, a 10 puntos del líder FC Barcelona.
En Champions tampoco se salvan, de los 3 partidos jugados hasta el momento, solo han ganado 1 y perdido 2. Y el día jueves, sufrieron contra un equipo de sexta división, que fácilmente podrían considerarse un club amateur. Lo más insólito es que ganaron de manera polémica, pues fútbol no mostraron nunca. Así que toda esta situación hace pensar que en el cuadro colchonero existe un tipo de complot para sacar a Simeone.
El único jugador del Atlético que no estaría haciendo cama a Simeone
Es inaudito que jugadores como Antoine Griezmann, Ángel Correa, Sorloth, Julián Álvarez, Rodrigo Riquelme, Reinildo, Oblak y muchos más, estén en tan bajo nivel, cuando la temporada pasada tuvieron un nivel muy destacado, tanto en el club colchonero como en sus respectivos clubes. Ni la afición ni la directiva termina de comprender que está pasando.
El argumento que refuerza la hipótesis acerca de la cama que le están haciendo al Cholo, es el hecho de que su hijo Giuliano sea el único que está rindiendo. Aunque no ha marcado goles y no suma muchos minutos en la parcela deportiva, es el único que se le ve corriendo todo el tiempo, y demostrando ganas de querer ganar. Un entusiasmo que no se ve en otro jugador del cuadro rojiblanco.
Y hablando del hijo de Simeone, este fue protagonista en la última polémica del Atlético
Corría el minuto 79 del partido que el cuadro madrileño jugaba contra el Vic de la sexta división, por la Copa del Rey. Increíblemente el compromiso aún iba empatado 0-0. Un resultado parcial que hacía ilusionar al conjunto vicense, pero que impacientaba a toda la afición colchonera que se acercó al Hipòlit Planàs para presenciar el juego. Giuliano Simeone recibe un balón por el costado derecho, donde el argentino aprovecha para entrar con alto grado de peligro, pero en ese entonces es interceptado por un defensa rival.
A primera vista parece que el zaguero catalán cierra al atacante gaucho, pero en una toma más cercana se ve que en ningún momento lo toca. Lo que hace el ex Zaragoza es recoger el pie y fingir que lo han cruzado abajo, disimulando también una aparatosa caída. Al final, el árbitro madrileño se traga la jugada y pita el penalti, mostrando la segunda amarilla al defensa para finalmente darle la roja. Posterior al 0-1, vino el segundo tanto de los pies de Álvarez.