Con altos niveles de satisfacción han tomado desde la capital el siguiente paso del club italiano con el punta español
Atlético de Madrid tiene claro que deberá esforzarse mucho más para tener abarcado todo el panorama que reflejan sus jugadores a lo largo y ancho del continente. Y uno de los casos más especiales lo protagoniza Álvaro Morata, el delantero con pasado merengue que por estos días se desempeña en la Juventus de Turín.
Pues bien, este es uno de esos temas que estaba en el tintero y que debía ser resuelto antes de entrado el verano para entrar en especulaciones densas. Hoy la claridad ha llegado, y tanto Juventus como Morata han decidido ampliar su vínculo una temporada más. Esto da finalización a las especulaciones de campo que le ponían en la lucha por regresar sin ser del gusto de Diego Simeone.
Con la definición legal de Morata en Juventus, es el momento para que el Atlético planifique el resto de su entrada en el mercado
Se necesitaba de la claridad, es apenas normal que suceda y que se ejemplifique para hallar respuestas. Morata al irse cedido una vez más deja al cuadro colchonero 10 millones de euros, y les hace olvidarse de su elevada ficha por un año entero. Eso sí, no finaliza el trato que sigue extendiéndose para el verano de 2022 con una opción de compra que se acerca a los 25 kilos.
La marcha de Paulo Dybala, y las complicaciones para poder firmar a un goleador de raza les ha movido a sellar este acuerdo. Morata no está siendo tan efectivo, pero es claro que al lado de Cristiano Ronaldo ha aprendido bastante y es ahora más un jugador de equipo. Pirlo confía demasiado en su instinto, pero al tiempo le ha dejado claro que puede perder su lugar a manos de un artillero que logren fichar.
La extensión obliga a dilatar la venta del punta hasta el verano siguiente a este que está por llegar
Otro gallo cantará en 2022, momento para el cual el Atlético espera definir de una vez por todas este asunto. Su idea es venderle, y contar con ese dinero para entrar de lleno al mercado con argumentos de peso. Se sabe que no van a efectuar la compra de Dembélé, y tampoco van a llegar a instancias en la compra de Raúl de Tomás, así que deberán clarificar su rumbo si quieren ser importantes.
Por el momento es todo incertidumbre, pero tiempo habrá y esperan que coseche una buena temporada siguiente para que terminen de pagar el excedente. Un dolor de cabeza menos para Simeone, que ya estaba analizando las vías de ubicación para un jugador con el que los conflictos parece que siempre han existido.