El club colchonero se muestra activo en el mercado estival
El Atlético de Madrid está más presente que nunca en el mercado estival, y uno de sus movimientos más vistosos será pagar la cláusula de Mikel Merino. El mediocampista entró por los ojos de Simeone, quien lo ha incluido en su carpeta de fichajes subrayado con rojo. Al parecer el perfil del jugador encaja la perfección en su esquema táctico.
Por otra parte, el mediocampista navarro quien juega para la Real Sociedad y que tiene contrato hasta 2025, no quiere salir de San Sebastián. Mikel ya expresó sus deseos de continuar con la entidad donostiarra y ha rechazado tajantemente la propuesta del club colchonero. De esta manera el jugador se lo ha puesto difícil al Atlético.
El Atlético no le bastará con pagar la cláusula de Mikel Merino para obtener sus servicios
El dinero siempre ha sido un condicionante para cerrar grandes operaciones en el mercado de jugadores. No obstante este caso es diferente, ya que el Atlético está en la capacidad de pagar la cláusula del mediocampista navarro, pero aún así no podrían obtener su pase. Mikel Merino ha sido directo y ha manifestado que no quiere salir de la Real Sociedad.
Las fuentes familiares del jugador, habrían apoyado la decisión y confirmaron que el centrocampista de 25 años, está muy bien bajo las ordenes de Imanol Alguacil. Sin embargo el club colchonero no bajará los brazos tan pronto y seguirá en contacto con el navarro y por supuesto con el conjunto Txuri-urdin.
Mikel Merino y su gran compromiso con la Real Sociedad, deja descolocados al Atlético y otros clubes
El ex canterano del Osasuna siente que su apogeo lo está viviendo ahora mismo con el club reala. Por ello quiere quedarse en San Sebastián, pues siente que puede seguir logrando grandes cosas, como el título de Copa del Rey ante el Athletic. La gran evolución que ha tenido bajo las ordenes de Alguacil, lo han llevado a ser uno de los preseleccionados en la selección que representará a España en Tokio 2021.
El Atlético no ha sido al único que le ha dado calabazas, pues hace un par de semanas, el rechazado fue el FC Barcelona. Koeman venía dispuesto a convencer al mediocampista el cual pretendían ficharlo a modo cesión. En esta ocasión, el club colchonero que ya tiene listo los 60 kilos, espera que el jugador cambie de opinión, lo cual no será nada fácil.
