Se ve cada vez más cercana la posibilidad de incluir al balcánico que no quiere continuar en Italia
La situación contractual de Marcelo Brozovic en el Inter de Milán es cada día más complicada, tema que tiene atentos a todos los agentes que han estado siguiendo su evolución, entre ellos algunos del Atlético. Como es bien sabido, el motor el club neroazzurro termina su contrato el siguiente 30 de junio y queda en libertad para asumir un nuevo reto.
De hecho, esa ha sido la inclinación mayor por parte del equipo de la capital, que sigue peinando opciones de cara al futuro. No obstante, todo esto no saldrá tan barato como creen, para poder ejecutarlo deben seguir una pista y esa es la de la titularidad. Una exigencia bastante ríspida que sigue siendo analizada.
Si el Atlético quiere hacerse de los servicios de Brozovic antes tienen que cumplirle uno de sus caprichos
La temporada que está haciendo es fabulosa, de hecho, es catalogado junto a Lautaro Martínez y Nicoló Barella el mejor jugador del equipo. Eso ha llevado a que se interesen de más y le pongan sobre sus manos una posibilidad muy positiva. Pero quiere jugar de inmediato, lo que significa un plan migración en el equipo colchonero.
En su posición actualmente compite Koke y también Rodrigo de Paul, y uno de ellos debe salir. Una tarea para nada sencilla que deja como semblanza una fuerza desmedida en la directiva que debe controlar sus recursos a futuro. No se sabe qué tan factible sea o si tan siquiera lo piensen hacer.
La lucha no será en solitario
Por otro lado existen tres fuerzas muy poderosas que podrían interponerse en ese hecho. Una es la del propio Inter de Milán, que busca por todas las vías posibles hacerle entender que extender su vínculo es una de las cosas más beneficiosas que existen. Le aumentan el valor de su ficha y fuera de todo le firman por tres años.
Al otro extremo está el PSG y el FC Barcelona, que se han visto tentados ante la gran posibilidad de sumarlo de forma gratuita. Habrá que ver si en definitiva esta operación rinde sus frutos, o si acaba cediendo por otro camino que al final se está viendo como una carrera de 100 metros planos.
