Atlético de Madrid recibe este lunes al Real Valladolid en el Metropolitano con el objetivo de mantener su plaza en Champions, mientras que el conjunto pucelano llega como colista y con urgencias extremas
Atlético de Madrid y Real Valladolid se miden este lunes 14 de abril en el Riyadh Air Metropolitano, con dinámicas opuestas y mucho en juego. El equipo de Diego Simeone llega a esta jornada 31 con 60 puntos y en plena pelea por asegurar la tercera plaza, mientras que los pucelanos, con 16 puntos y últimos en la tabla, apenas mantienen esperanzas de salvación.
Los números son una fotografía clara de la diferencia entre ambos. El Atlético ha ganado 17 de sus 30 partidos y ha marcado 49 goles, mientras que el Valladolid sólo ha sumado cuatro victorias y ha encajado 69 tantos. Pero más allá de las estadísticas, hay un contexto emocional que puede condicionar el duelo, los de Simeone vienen de vencer a domicilio al Sevilla, mientras que los de Álvaro Rubio llegan tras un durísimo 0-4 ante el Getafe. Dos caras de una misma liga.
Oblak lidera una defensa sólida ante un once visitante con dudas
En cuanto a los onces, el Atlético presenta un 4-4-2 de manual. Jan Oblak seguirá en portería, respaldado por una línea defensiva con Nahuel Molina, Le Normand, Lenglet y Azpilicueta. En el centro del campo se juntan Llorente y Barrios, escoltados por Giuliano y Gallagher en bandas, dejando arriba a Griezmann y Julián Álvarez, una dupla que mezcla magia y contundencia.
Por parte del Valladolid, André Ferreira estará bajo palos, protegido por Candela, Cömert, Özkacar y Aznou. La medular será para Iván Sánchez, Nikitscher, Mario Martín y Raúl Moro, mientras que Sylla y Latasa formarán la pareja ofensiva. Una alineación que mezcla juventud con inexperiencia, y que ha sufrido en sus últimas presentaciones.
Más tarjetas, más lesiones y menos margen de maniobra
En el apartado disciplinario, los datos también muestran la diferencia de control y madurez. El Atlético ha recibido 68 amarillas y solo 3 rojas, mientras que el Valladolid acumula 80 amarillas y 5 expulsiones. La intensidad sin control ha sido uno de sus talones de Aquiles.
Las bajas también condicionan. Simeone no podrá contar con De Paul, Correa ni Samuel Lino, todos lesionados o sancionados. En el Valladolid, el panorama es igual de delicado: Iván Sánchez es duda, Kenedy está fuera por virus y Mario Martín se pierde el partido por roja directa. La fragilidad del fondo de armario deja en evidencia a un equipo que vive con la soga al cuello. Sin duda, este partido se juega más en las cabezas que en los pies. Uno lucha por mantener su lugar entre los grandes; el otro, por no ahogarse en la orilla.
