Un pique en vestuarios y un grito que no pasó desapercibido
Antonio Rüdiger es un futbolista que no deja indiferente a nadie. Su carácter espontáneo y su pasión por el fútbol han convertido al central alemán en una de las personalidades más llamativas del vestuario del Real Madrid. Su última ocurrencia ha llegado tras la victoria ante la Real Sociedad en la ida de las semifinales de la Copa del Rey, donde protagonizó un momento curioso que ha generado revuelo en el fútbol vasco.
“¡Viva el Athletic de Bilbao!”, el grito de Rüdiger en Anoeta
Según ha informado Miguel Ángel Díaz en la Cadena Cope, tras el partido hubo un momento de tensión en la zona de vestuarios entre jugadores de ambos equipos. En medio de ese ambiente caldeado, Rüdiger irrumpió con un grito inesperado:
💬 “¡Viva el Athletic de Bilbao!”, exclamó el central madridista al entrar en los pasillos de Anoeta.
El comentario ha sorprendido tanto a aficionados como a jugadores, ya que la rivalidad entre la Real Sociedad y el Athletic Club es una de las más marcadas en LaLiga. Para algunos, ha sido una simple broma para calentar el ambiente, mientras que otros lo interpretan como una provocación tras la victoria blanca.
Su admiración por San Mamés y el ambiente del Athletic
Este episodio no es la primera vez que vincula a Rüdiger con el Athletic Club. Hace unos meses, en una entrevista televisiva, le preguntaron cuál era el estadio de LaLiga que más le había impactado, y su respuesta fue clara:
🔴⚪ “San Mamés. Tienen un ambiente increíble”, aseguró el alemán.
Una declaración que no pasó desapercibida, sobre todo viniendo de un jugador que ha competido en estadios legendarios de Alemania, Italia y la Premier League. Su aprecio por el ambiente de Bilbao no parece ser casualidad, y su espontaneidad lo ha vuelto a poner en el centro de la conversación.
Rüdiger, un futbolista sin filtros
Dentro del campo, Rüdiger es un defensor sin miedo al contacto, un futbolista aguerrido y con una intensidad que a veces roza la provocación. Fuera de él, su personalidad extrovertida y sin filtros lo convierte en un personaje carismático, capaz de encender debates y polémicas con un solo comentario.
📌 ¿Su grito en Anoeta fue una simple broma o un intento de avivar la rivalidad vasca? Sea como sea, queda claro que el alemán ha entendido muy bien las pasiones que rodean al fútbol español, y que su simpatía por San Mamés no es casualidad.
