Iker Muniain ha sido el gran protagonista del día en Bilbao, después de su excelente partido contra la Real Sociedad, donde ha firmado un golazo y además ha vuelto loco a todos sus marcadores. El navarro acaba la Liga como un tiro y ahora debe enfrentarse al momento más crítico de un curso muy bueno en el aspecto deportivo: su renovación. Tras aplazar las negociaciones, el futbolista ya no puede esquivar más la reunión con Urrutia, que será muy dura.
Según ha podido saber elGOLdigital.com, Muniain ha paralizado las obras del nuevo chalet que estaba construyendo en Berango, lo que podría ser un pista de las intenciones del futbolista. La decisión del futbolista podría confirmar que no que tiene intención de seguir en Bilbao o podría ser una manera de presionar a la directiva en su renovación. Hay que recordar que el mediapunta pide tres millones de euros por temporada en su renovación, una cifra a la que el Athletic no está dispuesto a llegar.
