El entrenador rojiblanco ha introducido principalmente dos variantes en el juego con respecto a la temporada pasada
El Athletic de Valverde avanza como un cohete hacia el objetivo de jugar, al fin, competición europea la próxima campaña. Es todavía muy pronto para decirlo y todo puede cambiar, pero hay dos cambios estructurales que afectan y mucho a los resultados. Aparentemente es casi el mismo equipo, pero no.
Las claves siguen siendo las mismas, juego de posición, intensidad en la presión, juego por bandas… pero ahora el equipo llega mucho antes al gol. El mercado de fichajes, lógicamente, no ofreció demasiados cambios en el Athletic de Valverde, pero sí hay dos cambios rotundos con respecto al año pasado.
Galarreta el as en la maga del Athletic de Valverde
La principal novedad es que Galarreta sí está ofreciendo el rendimiento que el año pasado estaba destinado a Ander Herrera. Para el sistema de juego de Ernesto Valverde es clave que haya un centrocampista que domine a la perfección el juego de posición y que se asocie con sus compañeros.
La temporada pasada, con las constantes lesiones de Ander Herrera, ese rol lo cubrían entre Dani García y Vencedor. Por eso creció tanto un Mikel Vesga que este año al fin puede dedicarse a lo que mejor sabe hacer. El trabajo en la recuperación de Vesga junto a la creatividad y control de Galarreta, hace que sea mucho más sencillo encontrar a Sancet y a los extremos en posición de ventaja.
El sentido común se impone con Iñaki Williams
El otro gran cambio pasa por asumir definitivamente que Iñaki Williams no es un 9. Curiosamente su productividad aumenta a medida que se aleja del área. De extremo, en banda derecha, con un nueve que sí es nueve como Guruzeta fijando centrales, el de Barakaldo acumula ya 3 goles y 2 asistencias.
Es más, la lesión de Nico Williams, que en otras ocasiones suponía un drama, ahora ni se ha notado. Dos partidos de ausencia y dos victorias merecidas y con solvencia. El gran damnificado es Iker Muniain. El capitán se ha caído definitivamente de las alineaciones y sus minutos son testimoniales. Pero este Athletic de Valverde ahora sí mira a Europa con posibilidades.
