Bordalás ya alista el partido de Copa a 15 días de que se de el pitido inicial en Mestalla
Exactamente faltan dos semanas para que el Valencia CF y el Athletic se vuelvan a ver y así luchen por un cupo a la final de la Copa del Rey 2021-22. Recordemos que las dos escuadras ya jugaron el partido de ida en San Mamés, el cual quedó empatado a 1 gol. El principal inconveniente para Bordalás es que no podrá contar con Maxi Gómez, ya que salió expulsado del compromiso.
A falta de 15 días y con dos partidos de liga por delante, el míster alicantino no se quiere dejar madrugar y desde ya va haciendo modificaciones al once titular que saldrá por ese cupo a la final. Aunque la contienda se vivirá dentro de la parcela deportiva y con los 11 contra 11, los entrenadores también vivirán su duelo aparte.
El as bajo la manga del Valencia CF para ganar el partido al Athletic
Sin duda alguna el partido que enfrentarán estos dos magníficos equipos, promete show, espectáculo, pero también mucha fricción. Y es que ninguno de los dos va a dejar espacios que puedan ser aprovechados por el rival. Desde ya se prevé que será un partido al contragolpe y el club que deje regalitos será el que perecerá al final.
Ante el panorama de como será el vibrante compromiso, Bordalás tiene un as bajo la manga llamado Ilaix Moriba. El mediocampista que oficiaba como ofensivo en el Barcelona, y que ahora es mediocentro en el Valencia, tiene una tarea importante. El jugador tiene un nuevo rol, pero concretamente saldrá a engañar al rival.
El entrenador del Valencia le ha puesto un objetivo a Moriba para despistar al Athletic
Desde antes que llegará al club ches, Ilaix Moriba se le conocía por ser un referente en la zona de ataque, y convertirse en el mejor socio de los delanteros. Ahora bajo las ordenes de Bordalás, su misión es ocupar la zona de pivotes y dar una mano a los defensas. A parte, tiene la labor de quitar balones y eso hace que entre al juego de choques.
El objetivo que le ha encomendado el entrenador alicantino al jugador africano, es el de jugar cerca de Gil, Guedes, y Duro. Pero cuando el equipo se repliegue a la defensa, dar una mano a Guillamón y recuperar balones en la parcela defensiva. Es decir, que el rival piense que está cumpliendo su rol habitual de atacante, pero lo que está haciendo es convirtiéndose en un zaguero más.