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El hincha del Athletic más grande de la historia en Anoeta

Otra de las escenas que dejó el derbi vasco tuvo que ver con un aficionado sin miedo alguno

Sin lugar a dudas, el duelo entre Real Sociedad y Athletic dejó grandes situaciones, las cuales fueron memorables donde cada hincha vivió de manera distinta este encuentro. Y es este el ingrediente que hace de un partido algo inolvidable, por ello, una escena se robó toda la atención en las redes sociales.

Fue un derbi vasco al más alto nivel donde ambos equipos nunca dieron el brazo a torcer. Tanto el txuri-urdin como el cuadro de los leones se exigieron al máximo para lograr los tres puntos. Finalmente, fue un empate que no dejó las mejores sensaciones en el local, pero que para la visita fue euforia pura.

Athletic Remiro
Álex Remiro en el momento del gol de Muniain

Un hincha del Athletic se llevó el protagonismo en el derbi vasco

Un gol sobre el último minuto de adición decretó la paridad. Este, obra de Iker Muniain con clara complicidad de Álex Remiro, quien intentó despejar con los puños, pero todo terminó en un gol insólito. Eso sí, aparte de todo lo mostrado en cuanto a fútbol se trata por parte de los aficionados, dejó un curioso hecho.

Movistar + hizo seguimiento a un hincha del Athletic en las cámaras del programa El Día Después. Es considerado el más grande en la historia por lo hecho en Anoeta, donde a pesar de estar en una grada repleta de aficionados de la Real Sociedad, siempre estuvo alentando a su equipo.

Gritó a rabiar el tanto conseguido por Iker Muniain

A pesar de que en la mayoría del encuentro, su equipo estuvo con el marcador abajo, este aficionado nunca perdió la esperanza. Fue con varios amigos seguidores del txuri-urdin, quienes incluso lo invitaron a unirse a la fiesta que había en las tribunas por cuenta del gol de los de Imanol.

El ahora famoso hincha del Athletic siempre estuvo dialogando con sus amigos sobre el encuentro y aunque las circunstancias eran complejas, nunca dejó de apoyar a su equipo. Lo mejor de todo, fue la última escena, donde se puede ver a nuestro protagonista celebrando a rabiar el gol de Muniain.