Los vascos logran sacar ventaja de la situación contractual del jugador, que sigue sin ser relevante esta temporada con los blues
Chelsea tiene muy complicada la continuidad de César Azpilicueta de cara a la siguiente temporada, y todo gracias a que el lateral o carrilero derecho ha dicho abiertamente que su deseo es no continuar vestido de azul para sumarse al Athletic de Bilbao. Por complejo que eso parezca esa ha sido la semblanza, y más ahora que ha manifestado tener certeza de sus decisiones.
No está siendo tenido en cuenta como antes, y por eso parece ser que ha encarrilado su postura. Además quiere cerrar su carrera con el club vasco, uno de los que le ofrecen continuidad y estar al más alto nivel además de un salario enorme. No obstante, la única condición es que se deshaga del contrato actual y firme de manera gratuita a partir del verano siguiente.
Por lo pronto el Athletic de Bilbao analiza las opciones con Azpilicueta teniendo en cuenta sus obligaciones en el resto de materias
Si bien es cierto que muchas de estas resoluciones saldrán de lo que va a ser la plenaria de elección de su presidente, el Athletic de Bilbao tiene bastante encarrilada esta situación. Buscan como no podía ser de otro modo establecer límites pero al tiempo acercarse al que ellos creen que es un jugador top para el bien de sus objetivos.
Azpi puede jugar tanto en línea de centrales como por fuera, su hábitat natural. A eso le incorpora experiencia, mucha calidad en el trato con la pelota y buena toma de decisiones. Muy correcto a la hora de defender, y una prenda de garantía cuando se tiene que salir a buscar los partidos.
El siguiente curso va a ser complejo competir y por ende su decisión
Ahora mismo hay mucha competencia en la zona, lo que le da a entender al navarro que no va a tener continuidad y le muestra el camino en ese sentido. Al tiempo su representante ha estado peinando las ofertas y se encuentra que la del club de San Mamés es la mejor de todas.
El reintegro a su casa es importante y ya lo decía antes, es hora de sentar un precedente. Tiene en mente jugarse el siguiente mundial en Qatar con la selección que orienta Luis Enrique; y tiene bastantes argumentos para pensarlo ya que en esas zonas por lo regular prioriza la seguridad.