La compañía aérea reasigna aviones para otros trayectos y ofrece un autobús como única alternativa a los pasajeros afectados
Air Nostrum ha explicado que la cancelación de 14 vuelos el pasado sábado 24 de agosto, incluidos los que conectaban Santander con Madrid, se debió a que tres de sus aviones quedaron fuera de servicio por problemas técnicos. Esta situación llevó a la aerolínea a realizar una reestructuración completa de su programación para ese día, lo que resultó en la cancelación de varias rutas regulares y chárter, afectando a ciudades como Madrid, Jerez de la Frontera, La Coruña, Valencia, Sevilla, Vitoria, Pamplona y Bruselas.
La aerolínea, filial de Iberia, afirmó que su decisión de reasignar aviones, incluida la utilización del avión destinado a la ruta Santander-Madrid para trasladar al Athletic Club de Bilbao desde Barcelona a Vitoria, fue parte de una estrategia para minimizar las consecuencias de las cancelaciones.
Repercusiones en la relación entre el Gobierno de Cantabria y Air Nostrum
El Gobierno de Cantabria no ha tardado en manifestar su malestar con Air Nostrum por la manera en que se gestionaron las cancelaciones y por la falta de opciones viables para los pasajeros. Según las autoridades regionales, la decisión de destinar el avión de la ruta Santander-Madrid para otros fines, mientras se dejaba a los pasajeros varados, perjudica gravemente tanto a las relaciones entre el Ejecutivo autonómico y la compañía como a la imagen de Air Nostrum en la región.
En un comunicado, el Gobierno de Cantabria informó que ha enviado una queja formal a la aerolínea, esperando una respuesta que podría derivar en la imposición de sanciones. Además, las autoridades han señalado que esta situación no solo afecta a la movilidad de los pasajeros dentro de España, sino que también impacta en las conexiones internacionales de aquellos que debían volar desde Madrid.
Impacto y respuesta de Air Nostrum a las críticas
Air Nostrum ha intentado justificar sus acciones alegando que la reasignación de aviones es una práctica común en la industria aérea cuando se presentan problemas técnicos inesperados. La compañía pidió disculpas a los pasajeros afectados por las molestias ocasionadas, subrayando que se tomaron medidas para reducir al mínimo el impacto de las cancelaciones. No obstante, la única alternativa ofrecida, un viaje en autobús, resultó en un considerable retraso, con pasajeros llegando a Santander en la madrugada.
Esta situación ha provocado una ola de críticas y podría tener repercusiones a largo plazo en la relación entre Air Nostrum y las autoridades de Cantabria, así como en la percepción pública de la aerolínea. A medida que se espera la respuesta oficial de Air Nostrum al Gobierno cántabro, queda en el aire la posibilidad de futuras sanciones y un deterioro en la confianza en la operativa de la compañía en la región.
