Críticas al periodista barcelonés por hacer preguntas llenas de peloteo y con poco interés informativo más allá de lo que ya se sabe
Al final de la entrevista con Jordi Évole, Leo Messi afirma sobre el momento actual del Barca: “Con Koeman se le ha dado una seriedad, el equipo está creciendo”. Tiene su mérito ser tan optimista teniendo en cuenta que évole revela al principio que la conversación se graba justo después de perder ante Cádiz y juventus.
El argentino, que repite en varias ocasiones que no actúa como postureo, que lo que sale a él le sale, y que confiesa ser introvertido y tímido y que le resulta difícil expresar sus sentimientos, dice que con Koeman la cosa va bien y que el equipo crece después de haberlo contra Cádiz en un partido indigno y haber hecho el ridículo frente a Juve , que si hubiera necesitado más de tres goles para ser el mejor del grupo que los habría puesto en. Todo en orden.
El Barcelona tiene ocho puntos de desventaja con el Atlético con un partido más, no han podido encadenar tres partidos consecutivos de La Liga ganando y después del último, en Valladolid, finalmente consiguió un poco de esperanza, porque Messi y Pedri fueron entendidos.
La siguiente noticia es que el crack se queda en su país y no jugará contra Eibar porque lo ha decidido con el entrenador y, horas más tarde, ayer, el club anuncia que tiene molestias en el tobillo y que sigue un tratamiento. O se explica fatalmente o es difícil entender que su capitán, el jugador más decisivo, no vuelve a jugar un partido justo cuando parecía que se estaban aferrando a un cierto pulso competitivo de nuevo.
Messi no juega en Eibar
Si se hubiera acordado, podrían haberlo explicado el día 22, tras ganar en Valladolid. Si usted también está en dolores, aún más razón. Todo lo relacionado con Messi siempre está envuelto en un lío en el que quien está más involucrado es él, quien, por un lado, siente “el villano de la película”, se queja del tratamiento de la prensa y no sabe decir qué amigo tiene en el camerino “porque hay mucha gente afuera y poco de la casa” , y, por otro, no se arrepiente de haber enviado un burofax al club de sus amores, lo mismo que piensa “está en un momento delicado”.
Messi sigue al Bara porque el Bartomeu lo tomó como rehén, pero en la entrevista con évole concluye: “Me gustaría irme de la mejor manera posible”. Y eso está empezando a parecer complicado. El dios en el césped que le gustaría ir a mercadona y psicólogo ni siquiera es capaz de regatear las dudas que surgen sobre por qué no estará mañana antes de Eibar. Y este es ahora el principal problema del Bara, no si en junio irá a jugar para el City, el PSG o los Estados Unidos.