Mendizorroza ya no es una opción para el choque entre Athletic y Real Sociedad
La final de la Copa del Rey que deben disputar Real Sociedad y Athletic se jugará con público. Ese es el acuerdo al que han llegado los clubes con la RFEF aunque el choque definitivo por el título tenga que desplazarse hasta el año 2021, eso sí siempre antes de la final del próximo curso. Una decisión que ha trastocado y mucho los planes del Deportivo Alavés.
Porque el conjunto vitoriano viendo las dificultades había propuesto que el partido se disputara a puerta cerrada en su estadio este mismo verano. El nombre de Mendizorroza estuvo durante varios días en la cabeza de la RFEF para definir el vencedor de esta edición de la Copa del Rey, pero finalmente la insistencia de los clubes terminó por descartar esta opción.
De esta forma el Deportivo Alavés deberá seguir esperando para albergar un evento de este tipo en su estadio. Sabe que a puerta cerrada no hubiera sido lo mismo, pero lo que sí hubieran permitido es que la afición de ambos equipos se desplazara hasta la ciudad y ayudara a impulsar nuevamente la económica.
Los equipos de la Liga traicionados
Ya es oficial el acuerdo a tres bandas entre la Real Sociedad, el Athletic y la RFEF para que la final de la Copa del Rey de la presente temporada se desplace en la fecha hasta que las medidas sanitarias permitan jugar con público. Una noticia que no ha sentado nada bien a muchos clubes de la Liga Santander, que se sienten engañados.
Algunos de estos equipos no entienden por qué este partido cambia su fecha hasta que los aficionados puedan acudir a los estadios de fútbol mientras que la Liga ya está planteando el regreso de la competición a puerta cerrada. Todo apunta a que las 11 jornadas restantes de esta temporada y el inicio del próximo curso se jugará sin público.
Esto dejará unas perdidas económicas muy importantes para los equipos, que además de dejar de ingresar una suma muy grande en cada partido por los ingresos de la taquilla también tendrán que devolver a los socios la parte proporcional de los abonos de los partidos a los que no vayan a poder asistir en los próximos meses.
